POLITICA

01 - Nov -2022 - 17:24

HABLÓ BOLSONARO, NO RECONOCIÓ LA DERROTA Y SE REIVINDICÓ COMO LÍDER DE LA DERECHA

Fueron 36 horas de silencio en Brasil. En horas de la tarde de hoy martes, por primera vez tras su derrota electoral habló el presidente de Brasil Jair Bolsonaro en medio de cortes de rutas por parte de sus simpatizantes. El mandatario brasileño brindó un breve discurso de dos minutos desde el Palacio de la Alvorada y aseguró que "seguirá cumpliendo todos los mandatos de la Constitución". Tampoco mencionó al reciente electo presidente Lula da Silva y comenzó su discurso agradeciendo a los 50 millones de brasileños "que votaron por mí. Nuestra robusta representación en el Congreso representa nuestra valores: Dios, patria y familia". Hasta el momento, el ultraderechista se había recluido en su residencia oficial, en Brasilia, la que solo abandonó para dirigirse al Palacio presidencial, pero sin hablar, ni siquiera en sus redes sociales. Mientras tanto, grupos de camioneros bloquearon desde el lunes a la madrugada carreteras en casi todo el país y, según videos divulgados en las redes sociales, sólo pondrán fin a la protesta cuando "el Ejército intervenga" para "impedir que vuelva el comunismo". Por su parte, la Corte Suprema ordenó que las fuerzas de seguridad depongan la actitud de los camioneros golpistas, a los que intimó con llevar adelante durísimas sanciones penales y pecuniarias. El ministro de Justicia, Anderson Torres, aseguró que la Policía Federal de Carreteras (PRF, por sus siglas en portugués) actúa de forma "ininterrumpida" y que ya ha despejado el tránsito en 192 "puntos de bloqueo". Pero en contrapunto, la propia PRF informó también hoy que todavía hay 267 bloqueos parciales o totales en carreteras de 23 estados del país. La protesta también ha sido repudiada por la Confederación Nacional del Transporte del país vecino y por todos los gremios formales de camioneros, que han aclarado que el movimiento es liderado por "pequeños grupos" autónomos. Bolsonaro declaró que los disturbios "son producto de indignación y la sensación de injusticia por cómo se desenvolvió el proceso electoral" y agregó que "las manifestaciones pacíficas siempre son bienvenidas, pero nuestros métodos no pueden ser los de la izquierda que siempre predicó a la población la invasión de propiedades y la destrucción del patrimonio", lanzó. En otro tramo añadió: "Superamos una pandemia y las consecuencias de una guerra. Siempre fui rotulado como antidemocrático, pero al contrario de mis acusadores siempre jugué dentro de las cuatro líneas de la Constitución. Soy ahora el líder de millones de brasileños que defiende la libertad económica, religiosa, de opinión, la honestidad y los colores verde y amarillo de nuestra bandera". Según trascendió, los políticos aliados a Bolsonaro, incluido su jefe de gabinete Ciro Nogueira, ya comenzaron a establecer contactos con los equipos de Lula para discutir una transición. Algunos, incluido el presidente de la cámara baja, han dicho públicamente que el gobierno debería respetar el resultado de las elecciones. Con Bolsonaro, nunca se sabe.