POLITICA

24 - May -2022 - 13:13

UNA SALIDA PREVISIBLE Y EL GRAN BONETE. Roberto Feletti dejó la Secretaría de Comercio Interior.

La salida del Secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, era más que previsible. Varias fueron las discrepancias en los últimos meses con la cartera de Economía que maneja Martín Guzmán y otro tanto con el Ministerio de Desarrollo que conduce el ultra albertista, Matías Kulfas. Ayer el funcionario presentó su renuncia en desacuerdo con la política de control de precios del Gobierno. En horas el presidente de la Nación Alberto Fernández la aceptó y llegó su reemplazante: el hasta ayer director del Banco Central, Guillermo Hang. La inflación no baja y un movimiento de órbita tampoco la hará bajar. Días antes de la renuncia, el área de Feletti pasó al ministerio de Economía de nación. Tres reuniones entre el saliente funcionario y Guzmán no alcanzaron para dar un giro en una decisión pre-anunciada. Evidente era la postura de Feletti: innegociable la comida de la población e impostergable. En reiteradas oportunidades, Feletti insistió con la suba de retenciones a las exportaciones. pero el gobierno camina en la cuerda del temor cuando mira el cuco de la 125 y a cualquier situación posible que lo emparente con la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández. A eso se suma un pánico expuesto en relación a los medios de comunicación. Las cartas estaban echadas: un exilio obligado ante el cambio de órbita, una negativa al aumento de retenciones, recortes en su área y la incomprensible actitud del ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, que como quien no quiere la cosa salió públicamente hasta desmentir al propio presidente: "No va a haber aumento de retenciones". El desacople de precios internacionales vía retenciones no iba a ser tenido en cuenta por el entorno de Alberto Fernández. Tampoco la propuesta de crear un Comité de Crisis para analizar el conflicto global y el impacto en alimentos, tampoco achicar la brecha entre Precios Cuidados y Descuidados, dando más aumento a Cuidados y negociando con empresas que no hubiera más remarcaciones. Mientras tanto, Domínguez agregaba en declaraciones a la prensa: "Nosotros tenemos una visión y yo tengo el privilegio, la bendición de Dios y la confianza del presidente para esta tarea". Lamentablemente las "creencias" lejos están de las políticas necesarias y de las decisiones contundentes ante los poderes monopólicos y formadores de precios, no tienen Dios, tienen billetes. Según el área de Comercio Interior en momentos de Feletti, si ante la crisis más aguda, se hubiese tomado la decisión sobre las retenciones del 12 al 15% en trigo, el Estado hubiese conseguido ingresos por 638,75 millones de dólares. Una caída de los precios internos de productos básicos y fondeo para sostener los fideicomisos de precios estables. Pero Guzmán ya había dicho, días antes, que no habría retenciones. ¿Pues entonces quien lo tiene? ¿Yo señor?, no señor. El presidente de la Nación declaró públicamente analizar la suba de retenciones, ¿pues entonces quien lo tiene? ¿Yo señor?, no señor. Domínguez arremetió con la negativa a la suba, ¿pues entonces quien lo tiene? ¿Yo señor?, no señor, el señor me tiene bendecido.