POLITICA

18 - Dec -2021 - 8:00

DIPUTADOS: LA OPOSICIÓN VOTÓ EN CONTRA Y DEJÓ SIN PRESUPUESTO A LA ARGENTINA PARA EL 2022

Ayer, tras una sesión maratónica de más de 20 horas, el bloque opositor votó en contra y dejó al país sin presupuesto para el 2022. Por primera vez en la historia, desde la llegada de la democracia que un presidente no contará con el presupuesto anual confirmado por el Congreso Nacional. En 2011, se enfrentó con lo mismo Cristina Fernández de Kirchner, pero aquella vez no dieron quórum para el tratamiento en el recinto. Era de esperar viniendo del sector de "no se pero me opongo", pero esta vez, en un contexto complejo de pandemia y una deuda heredada a resolver con el FMI, las posiciones de JxC y de radicales empapó el recinto de un centrado egoísmo y falta de responsabilidad democrática. La izquierda hizo lo suyo y junto con los libertarios, también, se plegaron un arsenal para golpear al gobierno, como si en verdad el golpe no estuviera dirigido a todos los argentinos y argentinas. El alto voltaje se pronunció durante la sesión con agravios permanentes en una afilada insistencia de esmerilar al oficialismo. "Para ustedes la política es conflicto y para nosotros la política es consenso", dijo el Diputado De Loredo, presidente del nuevo bloque Evolución, mientras señalaba las bancas ocupadas por diputados del Frente de Todos y sus aliados. Sin dudas De Loredo comprende el consenso para el resto y no para sí: "No voy a conceder interrupciones señor presidente, ya las concedí y me traicionaron", agregó envuelto en su propia contradicción. El presidente de la Cámara, Sergio Massa, repicó una y otra vez que tenía paciencia para esperar que los diputados y diputadas de Juntos por el Cambio definieran su postura respecto al pase o no del proyecto a comisión y calmar las aguas, pero el diputado radical Miguel Ángel Bazze pidió la palabra y encendió la mecha: "La paciencia es nuestra, desde un principio dijimos que íbamos a facilitar el tratamiento de este proyecto, vinimos a dar quórum, dimos el debate. Cuando comenzó el debate el presidente del bloque planteó un cuarto intermedio para que ustedes -el oficialismo- tomaran la decisión de volver el proyecto a comisión y volverlo a estudiar, y en lugar de aceptar la propuesta siguieron adelante con el debate, sin dar marcha atrás", apuntó a modo de "reto". Al final se auto abrió la jaula y agregó: ¡No señor Presidente, nosotros somos los que tenemos paciencia, es lo único que faltaba, lo único que faltaba, pedazo de pelotudo!". Allá, a lo lejos, saltó la Diputada Graciela Camaño: "La gente que nos mira no debe entender nada de lo que pasa acá adentro" y durante su exposición dedicó su tiempo para exponer los intentos de algunos diputados para "doblegar la voluntad de alguien que acompañaría el presupuesto". Le sugirió al oficialismo que "para acordar hay que bajarse del pedestal y hay que valorar la opinión del otro. Vinieron a cojudear un presupuesto con un número que no tienen, esta es la verdad", mientras remarcó que su bloque de 8 diputados no acompañaría el presupuesto. Camaño se sumó al discurso opositor que seguramente estaba definido de antemano, no había que ocuparse del presupuesto, sino utilizar la sesión para dejar a claras vistas que el gobierno había perdido las Legislativas en la última elección llevada adelante el 14 de noviembre. Cualquier canal de TV que transmitiera momentos del recinto encontraría en cada discurso la misma insistencia: "perdieron". Cuando todo parecía indicar que oficialistas y opositores acordarían el pase del proyecto Presupuesto 2022 a comisión, el presidente del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner, pidió la palabra: "Me llama poderosamente la atención el comportamiento que están teniendo un ex vicejefe de Gobierno, una ex gobernadora de la provincia de Buenos Aires, un ex ministro del Interior y el ex presidente de esta Cámara ante una situación gravísima en la que dejaron este país cuando lo endeudaron en 44 mil millones de dólares", disparó Kirchner, en alusión a figuras relevantes del gobierno de Cambiemos que hoy ocupan una banca en la Cámara Baja. Ante una lluvia de gritos y abucheos, Kirchner solicitó en varias oportunidades: "Yo los escuché; aprendan a escuchar, aprendan a escuchar". "Lo que uno quiere es que podamos votar un pedido de nuestro Presidente, un Presidente que se compromete a enviar dos proyectos al Congreso cuando llegue el acuerdo con el Fondo Monetario, que ojalá hubieran reaccionado en el pasado tan meticulosa y agudamente quienes hoy son oposición para pedir que tamaño endeudamiento pasara por este Congreso para cuidar nuestra democracia", agregó "Claro que leemos el resultados de las urnas y esta fue una decisión intermedia, la del 19 fue la que decidió quien gobernaba la argentina... Votemos por sí o por no y terminemos con este show", puntualizó el diputado oficialista. Cristian Ritondo de JxC, tomó el micrófono y reveló su más desbocado e incomprensible discurso, "nuestro bloque iba a acompañar", pero al parecer quiso cargar tintas y en "modo" paternalista dijo "pero ahora no". Para poner claros, Máximo se portó "mal" en el discurso y Ritondo no le da los caramelos. Una posición dislocada e irresponsablemente infantil. Cerca está de tomar a la población, poco más de estúpidos. La decisión del bloque opositor estaba tomada desde antes de iniciar la sesión. Pero Ritondo fue por más y se calzó el traje de mentiroso: "Diálogo es respeto al otro, y entender cuando uno gana y cuando uno pierde. En la ciudad de Buenos Aires, nunca el kirchnerismo nos votó un presupuesto. En la provincia de Buenos Aires, nunca nos votó un presupuesto. Y en el gobierno de Mauricio Macri, nunca nos votaron un presupuesto". Cualquiera podría revisar diarios de la época y estaría confirmando que Ritondo falta a la verdad y que el kirchnerismo sí votó y/o dio quórum para aquellos presupuestos. La iniciativa logró el respaldo de 121 legisladores del oficialismo y sus aliados pero fue rechazada por 132 votos de la oposición, moción que finalmente primó, a pesar de las negociaciones que se mantuvieron hasta último momento en búsqueda de consensos. El presupuesto Nacional establece la proyección de ingresos por la recaudación, los préstamos, derechos de exportación y el cálculo de gastos para cada área. También indica cuál va a ser la dirección que tendrá la gestión, de acuerdo a qué área destine mayores partidas. Otro punto importante se centra en un acuerdo de renegociación de deuda con el Fondo Monetario Internacional, un actor que sobrevuela la negociación de los recursos internos, porque comienzan a producirse el año próximo vencimientos muy altos, que Argentina no podrá pagar. Una de las facultades que tiene el presidente de la Nación es prorrogar la Ley de Presupuesto que rige para 2021 a través de un Decreto, pero esta opción tiene sus costados complejos, ya que la proyección de desempeño para 2022 difiere mucho de lo que sucedió en este segundo año de pandemia. Ahora, el Gobierno deberá decidir cómo manejar los recursos del 2022, sin una ley de leyes votada por el Congreso.